Pese a que el entorno de negocios no favorece las inversiones, compañías de este sector pronostican un incremento de la demanda de sus servicios en 2023
Para desescalar operaciones o concentrarse en los negocios «core», muchas grandes compañías están delegando procesos y controles en consultoras especializadas en Business Process Outsourcing (BPO) o en español, terciarización de procesos de negocios.
Al contar la Argentina con profesionales altamente calificados en áreas legales, de compliance, contabilidad, etc. por salarios más bajos que los de otros países (medidos en dólares), no es extraño que este negocio esté avanzando a pasos agigantados.
Firmas del sector confirmaron a este medio haber multiplicado su personal hasta 30% en lo que va de 2022 y no ven que esa tendencia vaya a desacelerarse.
Asimismo, pese a que el entorno de negocios en la Argentina no favorece la concreción de inversiones, las compañías de este sector pronostican un nuevo incremento de la demanda de sus servicios en 2023.
Más talentos para BPO
«El BPO es una de las actividades que venían creciendo previo a la pandemia y se potenciaron luego de ella. Quedó evidenciado que ciertas actividades que se venían haciendo in-house y por personal propio podían realizarse por proveedores externos, en tanto que las empresas así pueden contratar personal para su ‘core business’ y delegar el resto de las tareas», explicó Pablo Soto, socio de Fidem Partners.
Por ese motivo, el ejecutivo anticipa que tanto este año como 2023 el negocio del BPO en la Argentina verá indicadores de crecimiento.
Gonzalo Murguiondo, Socio BPO de Baker Tilly coincidió, pero indicó que se trata de una tendencia mundial: «El BPO ha evolucionado de manera considerable durante los últimos años, en línea directa con lo que ha madurado y evolucionado el mercado. Algunos años atrás puede que solamente se le haya considerado una forma de tercerizar trabajos para abaratar costos, bajar riesgos y mejorar la productividad, pero ahora las ofertas de BPO son mucho más inteligentes y customizadas».
Por su parte, Ana Chavarría, Gerente de BPO de PGK Consultores, comentó que «el sector está en constante evolución con perspectivas muy positivas, debido a eso hemos reforzado la dotación del equipo, que ha crecido en un 30% en lo que va del año con el fin de poder abastecer la demanda actual y proyectada».
«En los últimos dos años el sector de exportación de servicios profesionales basados en el conocimiento, tanto los de BPO como los centros de servicios compartidos (SSC, por sus siglas en inglés) vienen funcionando muy bien, no solo por la ventaja que pueden tener a nivel cambiario sino por el pesonal profesional que tiene la Argentina con un nivel de manejo de ingés avanzado, que trabaja en la misma franja horaria que las casas matrices que están en America», agregó Matías Ghidini, director general de GhidiniRodil.
El líder de esa firma de headhunting agregó que «este contexto hace que la búsqueda de personal específico para este tipo de negocio, que son personas generalmente jóvenes, de carreras contables o administrativas, y con buen inglés, haya crecido y ese sea un perfil altamente demadado hoy en el mercado.»
Murguiondo aseguró también que el mercado tiene una demanda diversa que provine de compañías disímiles, desde startups de capitales extranjeros, pasando por call centers, hasta sucursales de empresas multinacionales, entre otras. El directivo de Baker Tilly estimó que esas compañías están teniendo ahorros que van entre un 30% y 40% al terciarizar estos procesos, dependiendo de múltiples factores.
Soto aclaró que en la Argentina la mayoría de las firmas que compran estos servicios son compañías de capitales extranjeros con subsidiarias en Argentina que requieren de un compliance similar al que tienen en sus países de origen. Y que tomando en cuenta los costos operativos que una empresa deja de tener al delegar estos procesos, en general se ahorra un 40% al contratar un BPO.
Perspectivas optimistas para 2023
Pese a que en la Argentina el entorno de negocios no favorece las inversiones y que de hecho desaparecen más empresas de las que se crean –hay actualmente 60.000 empresas menos que hace 10 años– en las firmas de BPO confían en que 2023 será un nuevo año de crecimiento continuo en su sector.
Los servicios de BPO son demandados por todo tipo de compañías, desde las filiales de multinacionales que terciarizan sus departamentos completos de administración, contabilidad e impuestos, hasta pymes o empresas familiares que no cuentan con esas estructuras.
Fernando Portus, Gerente de BPO de PGK Consultores, comento que en este momento lo más demandado en este campo son «los procesos de declaraciones impositivas mensuales; los procesos transaccionales contables habituales (carga de facturación de proveedores y procesos de pago, emisión de facturación de venta y registración de cobranzas); conciliaciones de cuentas contables y emisión de información financiera para apoyar a las empresas en la toma de decisiones.»
Otro de los procesos más comunes de la terciarización en firmas de BPO es el de liquidación de sueldos y remuneraciones, por el nivel de especialización que requiere esa tarea regular.
«Creemos y apostamos que en 2023 se creen nuevas empresas que necesiten de nuestro apoyo», adelantó Portus.